sábado, 22 de noviembre de 2008

Los ojos al frente

¡Qué cosa tan extraña!La gente nacemos para vivir,¿verdad?
Mientras voy caminando hacia algún sitio, o más bien, ese sitio se va acercando a mí, me pregunto cúantas personas de las que se me cruzan son especiales. Cuántas ya lo saben o cuántas aun no lo han descubierto. Cuántas se creen especiales pero no lo son. Me limito a mirarles a los ojos.
Las que miran de frente las puedo contar con los dedos de la mano. Me devuelven la mirada y me la guardo. El resto son autenticos borregos con visión lateral cuyos campos visuales sólo llegan hasta el nivel de sus cabezas. Además de ser incapaces de contemplar lo que hay ante sus narices no pueden esconderse entre las nubes. Conforme han ido viviendo, han ido perdiendo contenido hasta convertirse en personas vacías. Quiero ponerles la zancadilla y que se estampen de morros contra el suelo.

Al mismo tiempo siento un poco de miedo.¿Y si soy una de ellos?¿de esos seres extraños que tienen los ojos en las orejas?
Pienso en las miradas que he encontrado, y por muy pocas que sean, sonrío. Demasiado contenido como para estar vacía.

1 comentario:

Azorín dijo...

Cuando se es consciente de quienes son ellos y quien eres tu, automáticamente te desligas de ese tipo de personas.